Concierto por la 3ª República en el paraninfo de la UCM

El pasado 14 de abril se cumplieron 77 años de la proclamación de la II República Española, el periodo más emblemático de nuestra Historia, que nos fue arrebatado tras un golpe militar que culminó con 40 largos años de una dictadura fascista caracterizada por la represión que acabó con los sueños y el esfuerzo de toda una generación.

La Segunda República supuso avances culturales y sociales, como el sufragio universal femenino, hasta la fecha impensable en la sociedad española. La separación iglesia-estado fue otro de los grandes logros de la República, sobre todo en cuanto a educación se refiere, una educación pública, universal, laica, gratuita y de calidad, que junto con la creación de escuelas y bibliotecas públicas unidas a campañas de lucha contra el analfabetismo lograron en pocos años un nivel cultural admirable y admirado en todo el mundo.

Como universitarios defendemos los valores que alzaron a la república a la cabeza cultural y de progreso de toda Europa. Valores como la educación pública, universal, laica, gratuita y de calidad que en la actualidad, mediante el tratado de Bolonia nos están intentando robar. El proceso de Convergencia Europea no es sino una de las mayores barbaries cometidas por el neoliberalismo contra la formación universitaria. La incursión de empresas privadas en la universidad supone un ataque contra los y las estudiantes, convirtiendo la universidad del conocimiento en una escuela de precarios, movida únicamente por intereses económicos. Esto supone la precarización de aquellos estudiantes que no disponen de suficientes medios económicos.

A nuestra generación, que no votamos la actual constitución de 1978, nos toca acabar el proceso de ruptura con el franquismo. En la actualidad no solo asumimos el millonario gasto de la familia real, sino que hemos de convivir día a día con la simbología fascista no solo en forma de estatuas, sino con sucesos como el asesinato del compañero antifascista Carlos Javier Palomino, o las últimas agresiones de Villaverde y Alcalá de Henares, entre otras muchas.

La pasividad de las autoridades a la hora de abordar estos temas, el apoyo institucional que reciben y la manipulación de los medios de comunicación hacen que los grupos neonazis puedan campar a sus anchas mientras el movimiento antifascista es criminalizado día a día, como en el caso de la Coordinadora Antifascista, a la que intentan ilegalizar y a la que desde aquí queremos enviar nuestro apoyo y ánimo para continuar la lucha.

Nuestra propuesta republicana debe recoger el espíritu de la 2ª y modernizar su ejemplo. Tiene que ser una 3ª república que avance en la dirección contraria a los actuales regímenes pseudodemocráticos de nuestro entorno europeo.

Para ello queremos una 3ª república con una democracia verdaderamente participativa.

Una república federal que reconozca el derecho de autodeterminación y las distintas realidades nacionales del actual estado español.

Una república solidaria con los países menos desarrollados económicamente del mundo, que se oponga a las normas comerciales de los organismos internacionales antidemocráticos actuales, como la OMC o el Banco Mundial. Que lleve acabo un modelo comercial justo y no abusivo y que no utilice como fuente de sus ingresos el comercio de armas.

Una república que se oponga bajo cualquier circunstancia a la violencia como medio de solucionar los conflictos entre países.

Una república que garantice el derecho a una vivienda digna.

Una república que no tome al liberalismo como modelo económico y se oponga a él de forma enérgica.

Una república que lleve a cabo la separación definitiva entre la iglesia y el estado y nos convierta en un estado laico.

Una república con un desarrollo económico ecológicamente sostenible.

Es decir, una república federal democrática (socialista) que garantice la justicia social, la igualdad y los derechos sociales a todos sus ciudadanos.

A pesar de las trabas que el movimiento republicano sufre constantemente, estamos hoy aquí, sin el apoyo de las instituciones académicas de la UCM, que se han negado en todo momento a prestarnos su ayuda, para rendirle un sentido homenaje a la Segunda República y reivindicar la lucha hacia la tercera.

Con la Segunda en el corazón, y la Tercera en la mente, gritamos:

¡¡¡VIVA LA REPÚBLICA!!!